Los salarios ofrecidos a los nuevos empleados en China disminuyeron después de dos trimestres consecutivos de ganancias, en una señal de un debilitamiento del mercado laboral que está exacerbando la persistente deflación y pesando sobre el crecimiento económico.
Los salarios mensuales promedio ofrecidos por las empresas a los nuevos empleados en 38 ciudades chinas clave cayeron un 0,6% en el tercer trimestre respecto al año anterior a 10.058 yuanes (1.423 dólares), según datos proporcionados por la plataforma de contratación en línea Zhaopin Ltd. y compilados por Bloomberg. La disminución sigue a un modesto repunte del 2,2% y 0,5% en el primer y segundo trimestre, respectivamente.
Las empresas chinas reducen los salarios de contratación en el tercer trimestre respecto al año anterior
Las cifras se suman a otros datos recientes que revelan un empeoramiento del mercado laboral que desalienta a los residentes a gastar más y profundiza un ciclo de caídas de precios y salarios .
El deterioro de la situación económica supone una gran amenaza para el objetivo de crecimiento de China de “alrededor del 5%” para 2024, por lo que las autoridades entraron en acción y desplegaron una andanada de estímulos en las últimas semanas. Ahora se están creando expectativas de que el gobierno introduzca más ayuda en forma de gasto público, que podría ofrecer subsidios a los hogares e impulsar el consumo.
En septiembre, el subindicador de empleo del índice de gerentes de compras no manufactureras de China cayó más profundamente en territorio de contracción para alcanzar el nivel más bajo desde diciembre de 2022, cuando el país se vio afectado por una ola de salida de infecciones por Covid tras el fin de los controles de la pandemia.
La tasa oficial de desempleo subió a un máximo de seis meses en agosto, mientras que el desempleo juvenil aumentó a un récord este año.
El año pasado, los salarios de los nuevos empleados registraron su racha más larga de caídas desde que los primeros datos sobre cambios anuales estuvieron disponibles en 2016.
Como muestra de la desaceleración del consumo, el gasto turístico durante una semana de vacaciones a principios de octubre fue inferior a los niveles previos a la pandemia . Los residentes viajaron más, pero su gasto medio por viaje se redujo en comparación con 2019.
