Las previsiones de crecimiento se redujeron cuando Lagarde dijo que algunos responsables de la toma de decisiones respaldaron una reducción mayor
El Banco Central Europeo redujo las tasas de interés en un cuarto de punto a 3 por ciento, al tiempo que diluyó su lenguaje agresivo y advirtió que el crecimiento sería más débil de lo que había pronosticado anteriormente.
El recorte del BCE —su cuarta reducción de los costos de endeudamiento desde junio— lleva la tasa de depósito de referencia del banco central a su nivel más bajo desde marzo de 2023.
Christine Lagarde, presidenta del BCE, dijo que algunos responsables de fijar los tipos habían propuesto un recorte mayor, de 50 puntos básicos. Pero añadió que el apoyo a la reducción de un cuarto de punto fue finalmente “unánime”.
El economista del Deutsche Bank Mark Wall afirmó: “Se ha abierto más claramente la puerta a nuevos recortes”.
El cambio hacia una postura más moderada del BCE se produce en un momento en que la eurozona y Alemania, su mayor economía, luchan con un crecimiento débil y la amenaza de una guerra comercial global después de que Donald Trump ingrese a la Casa Blanca.
El recorte del jueves se produjo luego de que el BCE advirtió que la economía de la eurozona crecería solo un 1,1 por ciento en 2025, por debajo de su estimación de septiembre del 1,3 por ciento.
El BCE también redujo su previsión de crecimiento para 2026 en un punto porcentual, al 1,4 por ciento, y es aún más pesimista para 2027, cuando espera solo un crecimiento del 1,3 por ciento del PIB.
“El elemento que ha cambiado son los riesgos a la baja, particularmente los riesgos a la baja para el crecimiento”, dijo Lagarde.
Agregó que las amenazas de Trump de imponer aranceles generales de hasta el 20 por ciento a todas las importaciones estadounidenses —y el impacto en el crecimiento— “no estaban en la línea de base”.
Eso podría implicar que la economía de la eurozona, fuertemente exportadora, tendría un desempeño incluso peor que las proyecciones del banco central si Trump introduce los gravámenes después de regresar al cargo el 20 de enero.
El euro cayó un 0,1 por ciento tras la decisión a 1,048 dólares.
El BCE abandonó su compromiso de “mantener los tipos de interés oficiales suficientemente restrictivos durante el tiempo que sea necesario” para reducir la inflación hasta alcanzar su objetivo del 2%. En cambio, subrayó que los “efectos de la política monetaria restrictiva” se irán “desvaneciendo gradualmente” con el tiempo.
“La dirección actual está muy clara”, dijo Lagarde a los periodistas,
sugiriendo que el BCE seguirá reduciendo los tipos el próximo año. Sin embargo, subrayó que “el ritmo” de los recortes se determinará reunión por reunión.
Agregó que si bien “aún no se ha cumplido la misión” en materia de inflación, los encargados de fijar las tasas ahora creen que están “realmente en camino” de alcanzar su objetivo del 2 por ciento “de manera sostenible”.
El banco pronosticó una inflación general del 2,1 por ciento en 2025, del 1,9 por ciento en 2026 y del 2,1 por ciento en 2027.
“Los riesgos apuntan a que el BCE tendrá que hacer más, no menos, para apoyar la economía en 2025”, dijo Dean Turner, economista jefe para la eurozona en UBS Global Wealth Management.
Pero advirtió que “es más probable que esto resulte en más recortes más adelante en 2025 en lugar de movimientos más grandes en el corto plazo”.
Los inversores anticipan que el BCE recortará las tasas más que la Reserva Federal de Estados Unidos el próximo año, dado que se espera ampliamente que el crecimiento en la eurozona sea inferior al de Estados Unidos.
“El mensaje es una flexibilización gradual”, dijo Mariano Cena, economista europeo senior de Barclays.
Los operadores de los mercados de swaps mantuvieron en gran medida sus apuestas sin cambios tras la decisión. Esperan que el BCE lleve a cabo otros cinco recortes de un cuarto de punto antes del próximo mes de septiembre, lo que llevaría el tipo de depósito al 1,75 por ciento.
Los mercados de swaps están descontando alrededor de 0,75 puntos porcentuales de recortes de la Reserva Federal de Estados Unidos durante el mismo período, lo que reduciría el rango objetivo a entre 3,75 y 4 por ciento.
Más temprano ese mismo día, el Banco Nacional Suizo redujo a la mitad su tasa de política principal al 0,5 por ciento, un recorte mayor al esperado.
Recuperado de: https://www.ft.com/content/655cc50d-e23c-46bb-b19d-aaa48d22bc25?shareType=nongift
