Las ganancias de Tesla cayeron por segundo trimestre consecutivo mientras el líder de vehículos eléctricos seguía sintiendo el impacto de una demanda más lenta y una competencia más dura.
Los resultados financieros tampoco cumplieron con las expectativas de Wall Street tanto en términos de ingresos como de flujo de caja libre, lo que hizo que las acciones cayeran aproximadamente un 8% en las operaciones fuera de horario.
La rentabilidad sufrió un gran impacto como resultado de menores ventas y de que los compradores pagaron menos por sus modelos principales. El presidente ejecutivo, Elon Musk, atribuyó en parte el mediocre desempeño a una guerra de precios que estalló el año pasado cuando los rivales inundaron el mercado con sus propias ofertas de vehículos eléctricos.
‘Hubo bastantes vehículos de la competencia que llegaron al mercado, a los que no les ha ido muy bien, pero han hecho grandes descuentos en estos vehículos’, dijo Musk en una llamada con analistas.
Un punto positivo para Tesla fue una cantidad récord de ventas de créditos regulatorios a otros fabricantes de automóviles que no cumplen con los requisitos de emisiones. Los ingresos de esos créditos, esencialmente ganancias puras, aumentaron a 890 millones de dólares en el segundo trimestre, lo que representa más de la mitad de sus ingresos operativos para el período.
Musk dio algunos detalles adicionales sobre los planes futuros de vehículos de Tesla, diciendo que la compañía presentaría un robotaxi tan esperado en un evento a principios de octubre, dos meses más tarde de lo planeado originalmente. Explicó que el tiempo extra le permitiría mejorar el diseño del robotaxi, así como preparar algunos otros elementos para mostrar durante la presentación del producto.
El jefe de Tesla también proporcionó una actualización sobre el próximo modelo asequible, que, según dijo, está en camino de comenzar la producción en la primera mitad de 2025. Esta primavera, había dicho que eso podría suceder a finales de este año.
Cuando se le preguntó si Tesla vendería versiones simplificadas de sus vehículos actuales para hacerlos menos costosos, Musk dijo que no quería perjudicar la demanda de los modelos existentes de Tesla al dar más detalles sobre los planes futuros de la compañía.
Musk está tratando de guiar a la compañía a través de un período turbulento, mientras enfrenta desafíos en el negocio automotriz principal mientras sigue adelante con apuestas costosas en autos sin conductor y en inteligencia artificial. En repetidas ocasiones ha instado a los inversores a ver a Tesla como algo más que un simple fabricante de automóviles, diciendo que estas nuevas empresas podrían aumentar el valor de mercado de la compañía a más de 30 billones de dólares.
Por ahora, sin embargo, Tesla necesita que el negocio automovilístico financie esta costosa transición.
Tesla ha reducido parte de la producción de su fábrica, después de finalizar el primer trimestre con un número relativamente alto de vehículos sin vender. También redujo costos y despidió a más del 10% de su fuerza laboral global. Y aún así, sus ingresos netos cayeron un 45% en el segundo trimestre a 1.500 millones de dólares.
Si bien su flujo de caja se volvió positivo, su rentabilidad sigue bajo presión. Tesla registró un margen operativo del 6,3% en el segundo trimestre, por debajo del 9,6% del año anterior y por debajo del de muchos fabricantes de automóviles establecidos.
Después de años de aumentos de ventas de dos dígitos, el líder en volumen de vehículos eléctricos ha dicho que el crecimiento en 2024 sería “notablemente menor” que en el pasado, orientación que se reiteró el martes. La compañía se enfrenta a una mayor competencia en Estados Unidos y en todo el mundo, particularmente en China, donde su rival BYD amenaza con superar a Tesla como el mayor vendedor de modelos eléctricos del mundo.
El franco multimillonario se ha insertado recientemente más directamente en la carrera presidencial de Estados Unidos, apoyando la candidatura del expresidente Donald Trump a la reelección.
Musk dijo que Tesla pospondría la decisión de construir una planta en México hasta después de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. “Trump ha dicho que impondría fuertes aranceles a los vehículos producidos en México. No tiene sentido invertir mucho en México si ese va a ser el caso”, dijo Musk.
También minimizó el impacto de una presidencia de Trump que deshaga los subsidios actuales para los vehículos eléctricos, diciendo que sería devastador para los competidores pero bueno a largo plazo para Tesla.
Las dificultades actuales de Tesla se reflejan en el mercado de vehículos eléctricos en general, particularmente en Estados Unidos. Las ventas de vehículos eléctricos, que aumentaron durante la pandemia, se han enfriado durante el último año, y muchos estadounidenses consideran que los vehículos eléctricos siguen siendo demasiado caros para comprar y poco prácticos para el uso diario.
En toda la industria, las ventas de vehículos propulsados por baterías en EE. UU. aumentaron un 6,8 % en la primera mitad del año, según datos de Motor Intelligence, en comparación con un crecimiento del 50 % en 2023.
Una demanda de vehículos eléctricos más débil de lo esperado por parte de los consumidores y una avalancha de nuevos modelos han provocado una guerra de precios que está erosionando los márgenes de los fabricantes de automóviles.
General Motors retrasó el martes por segunda vez la fecha de apertura prevista para una nueva fábrica de camiones eléctricos en Michigan en respuesta a una demanda de los consumidores más lenta de lo esperado. Un nuevo Buick EV, cuyo lanzamiento originalmente estaba previsto para 2024, también se retrasó.
Tesla ha estado entre los más afectados por el aumento de la competencia por los vehículos eléctricos. La compañía representó aproximadamente la mitad de todos los vehículos eléctricos vendidos en EE. UU. en el primer semestre de 2024, en comparación con el 60% del año anterior.
Tesla ha dicho que está acelerando la introducción de nuevos vehículos, incluidos modelos más asequibles que se construirían en líneas de montaje existentes para ahorrar dinero.
La compañía también está recortando costos para ayudar a apuntalar los márgenes de ganancias que han estado disminuyendo como resultado de una serie de recortes de precios destinados a ayudar a impulsar las ventas. La compañía dijo que los despidos de esta primavera, que recortaron más del 10% de la fuerza laboral a nivel mundial, ayudarían a ahorrar más de mil millones de dólares al año en gastos operativos.
A medida que el principal negocio automovilístico de la compañía tropezó, Musk ha tratado de reunir inversores detrás de las empresas de inteligencia artificial de Tesla.
La compañía está invirtiendo mucho en centros de datos e investigaciones diseñadas para ayudar a desarrollar robotaxis autónomos y robots humanoides. Tesla planea gastar 10 mil millones de dólares sólo este año en gastos relacionados con la IA, ha dicho Musk.
“El valor de Tesla es abrumadoramente la autonomía”, reiteró Musk el martes, refiriéndose a los vehículos autónomos. ‘Si crees que Tesla resolverá la autonomía, deberías comprar acciones de Tesla, y todas estas otras preguntas están en el ruido’.
