Las tarifas de los fletes marítimos desde China están aumentando una vez más a medida que los exportadores anticipan los envíos para la temporada navideña, afectados por las preocupaciones sobre los aumentos de aranceles estadounidenses y las prolongadas perturbaciones en el Mar Rojo.
El Índice de Transporte de Contenedores de Shanghai, un indicador de las tarifas de transporte de contenedores compilado por la Bolsa de Transporte de Shanghai, subió un 12,6 por ciento a 3.044,77 la semana pasada. Fue la primera vez desde agosto de 2022 que el indicador, que se publica semanalmente, superó el nivel de los 3.000 puntos.
El impulso de crecimiento continuará a medida que más exportadores reserven espacios en buques con destino a Estados Unidos y Europa para ejecutar pedidos, dijeron los transportistas.
‘Los transportistas podrían enfrentar meses de tarifas muy elevadas y mayores retrasos a medida que una mayor demanda se combina con una capacidad restringida’, dijo en una nota de investigación Judah Levine, jefe de investigación de Freightos, una plataforma global de reserva de carga. ‘Pero la duración y la escala de estas perturbaciones y aumentos de precios podrían ser menos graves que los impactos sin precedentes observados durante la pandemia’.
Los exportadores chinos, desde fabricantes de prendas de vestir hasta fabricantes de juguetes y luces festivas, normalmente comienzan a enviar productos pedidos por compradores occidentales para Navidad y Año Nuevo a partir de julio. Este año, los exportadores comenzaron a entrar en pánico después de que el presidente estadounidense, Joe Biden, anunciara en mayo que Washington impondrá aranceles punitivos a productos chinos por valor de 18.000 millones de dólares, incluidos vehículos eléctricos, piezas de baterías y células solares.
Los aranceles adicionales aún no han entrado en vigor.
El costo de enviar un contenedor de 20 pies desde Shanghai a Europa asciende actualmente a más de 7.000 dólares estadounidenses, un aumento de alrededor de 1.000 dólares respecto al mes anterior, según Xiong Hao, subdirector general de Shanghai Jump International Shipping.
Añadió que había escasez de contenedores vacíos en Shanghai en medio de la creciente demanda de los exportadores.
HSBC dijo en un informe de investigación el lunes que el agotamiento de los inventarios de los minoristas estadounidenses significaba que ahora tenían que depender de las importaciones para satisfacer la demanda de los consumidores, impulsando la demanda de transporte de contenedores.
‘Las preocupaciones sobre una escalada de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China llevaron a los fabricantes a organizar los envíos de productos terminados lo antes posible’, dijo Yan Jun, alto ejecutivo de Jinghan Stainless Products, con sede en Shanghai, que fabrica y exporta productos de acero.
Las perturbaciones en el Mar Rojo, causadas por los ataques a barcos por parte de los rebeldes hutíes de Yemen, también son una gran preocupación, ya que los exportadores se apresuran a procesar los envíos más temprano que tarde, añadió.
Los exportadores chinos han sido testigos de una montaña rusa en los costos del transporte marítimo durante los últimos cuatro años.
Después de que China salió del primer bloqueo por coronavirus en el segundo trimestre de 2020, las empresas comenzaron a fabricar bienes a toda velocidad para satisfacer la demanda mundial reprimida, y la nación recuperó su lugar como la fábrica del mundo.
En agosto de 2021, una temporada alta para el transporte de contenedores desde China con destino a EE. UU. y Europa antes de la temporada navideña, docenas de exportadores que estaban dispuestos a pagar hasta 10 veces las tarifas normales para enviar su carga se peleaban por los espacios. .
En septiembre de 2022, los precios de los contenedores de envío de Shanghai a Estados Unidos se desplomaron casi un 90 por ciento desde su máximo.
Los puertos de Shanghai manejaron 49,16 millones de unidades equivalentes a 20 pies en 2023, un 3,9 por ciento más interanual y un 13,5 por ciento más que en 2019.
El centro comercial y marítimo del continente fue nombrado el año pasado el puerto de contenedores más activo del mundo, posición que ocupa desde 2010, cuando superó a Singapur, que ahora ocupa el segundo lugar.
