La administración Biden restringirá el uso de una disposición comercial que permite a los gigantes del comercio electrónico fundados en China, como Temu y Shein, realizar envíos más fácilmente a Estados Unidos, una medida que se produce en medio de una oleada de presión bipartidista para cerrar lo que los críticos consideran una laguna jurídica. .
La administración dijo el viernes que tomará medidas ejecutivas para tratar de detener un aumento en el comercio bajo lo que se conoce como la exención de minimis.
La administración dijo que, según una nueva norma que pretende proponer, los paquetes que contengan mercancías que estarían sujetas a aranceles según diversas secciones de la ley comercial no serán elegibles para el tratamiento de minimis. Alrededor del 70% de los envíos chinos de textiles y prendas de vestir están cubiertos por esos aranceles y ahora tendrán que ingresar a través de un método de entrada más formal, dijeron funcionarios de la administración.
Otra nueva regla bajo consideración agregaría nuevos requisitos de trámites a los envíos de minimis.
La exención, que permite que envíos valorados en 800 dólares o menos entren a Estados Unidos sin aranceles y con poco escrutinio, tenía como objetivo hacer menos oneroso recibir pequeños paquetes del extranjero o traer recuerdos de unas vacaciones en el extranjero. Pero Estados Unidos ha visto crecer el número de paquetes que ingresan a través de la exención a más de mil millones al año, un récord, a medida que las empresas de comercio electrónico con raíces en China emplean la disposición.
“El drástico aumento de los envíos de minimis ha hecho que sea cada vez más difícil detectar y bloquear envíos ilegales o inseguros que ingresan a Estados Unidos a través de esta vía”, dijo Daleep Singh, quien se desempeña como asesor adjunto de seguridad nacional para economía internacional del presidente Biden. ‘Es por eso que la administración está iniciando un proceso regulatorio para reducir el uso excesivo y el abuso de minimis’.
Un comunicado de la administración dijo que la mayoría de los paquetes de minimis ahora provienen de empresas de comercio electrónico fundadas en China.
Temu dijo que su crecimiento no depende de la política de minimis y que está revisando las nuevas propuestas de reglas. Shein dijo que espera trabajar con las partes interesadas en una reforma de minimis.
Los defensores del status quo dicen que la disposición ayuda a los consumidores y empresas estadounidenses a importar bienes de manera más barata y fácil. Pero los críticos han dicho que se está abusando de la disposición, permitiendo que se envíen grandes volúmenes de paquetes pequeños a Estados Unidos sin recibir un escrutinio que podría descubrir, por ejemplo, defectos de seguridad del consumidor o el uso de trabajo forzoso en la producción.
En medio de la presión de una serie de grupos, la administración había prometido previamente un mayor escrutinio de los paquetes.
Sin embargo, las nuevas medidas van mucho más allá y están destinadas a reducir la cantidad de paquetes que ingresan bajo la exención, dijeron funcionarios de la administración. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley han dicho que la avalancha de paquetes permite a los narcotraficantes en el extranjero ocultar cargamentos de fentanilo, lo que alimenta la crisis de opioides en Estados Unidos.
La administración Biden ha aumentado constantemente los aranceles contra China por lo que considera prácticas desleales, tras medidas similares del presidente Trump. Pero a pesar de esas acciones, Biden ha enfrentado una presión sostenida para poner fin al trato de minimis para los productos procedentes de China, incluidos los de los fabricantes nacionales de textiles y prendas de vestir.
Las empresas textiles estadounidenses cerraron 14 plantas en el lapso de unos pocos meses, dijo en abril Kim Glas, jefe del Consejo Nacional de Organizaciones Textiles, culpando de los cierres a una avalancha de moda libre de impuestos de Temu y Shein. Glas dijo el viernes que la medida de la administración Biden era un primer paso fundamental y pidió al Congreso que vaya más allá.
El asesor de Biden, Navtej Dhillon, dijo a los periodistas que la fabricación de textiles y prendas de vestir respalda decenas de miles de puestos de trabajo en “estados clave” como Georgia y Carolina del Norte. Ambos son considerados estados indecisos en las elecciones presidenciales.
La acción de la administración del viernes se produce apenas dos días después de que una mayoría de los demócratas de la Cámara de Representantes escribieran a Biden para exigir medidas firmes contra la exención, pero los legisladores de ambos partidos han expresado alarma por el creciente número de envíos. Los miembros de ambos partidos han presentado propuestas contrapuestas sobre formas de frenar el flujo de minimis, aunque hasta ahora demócratas y republicanos no se han puesto de acuerdo sobre qué forma debería adoptar el cambio legislativo.
Los funcionarios de Biden instaron al Congreso a aprobar una nueva ley, diciendo que reforzaría las medidas adoptadas por la administración el viernes.
Los principales legisladores de ambos partidos, incluido el presidente del Comité de Finanzas del Senado, Ron Wyden (D., Ore.) y el presidente del Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara, Jason Smith (R., Missouri), acogieron con agrado la medida y pidieron que el Congreso aprobara nueva legislación.
Algunos grupos empresariales, incluidos los que representan a los transportistas, se han manifestado intensamente en contra de los esfuerzos por cambiar las reglas de minimis.
Deshacerse de la exención corre el riesgo de sufrir represalias por parte de otros países, lo que podría afectar a los exportadores estadounidenses, dijo John Pickel, director senior de política de la cadena de suministro internacional en el Consejo Nacional de Comercio Exterior. El directorio del grupo incluye a Amazon.com junto con FedEx y DHL.
La exención también ahorra dinero a las pequeñas empresas cuando importan y beneficia a las comunidades de bajos ingresos, dijo Pickel.
