Los costos de flete para los envíos de contenedores están cayendo dramáticamente a medida que las exportaciones de China se desaceleran. El índice de flete de liquidación de contenedores de exportación de Shanghai para la ruta de América del Norte ha caído casi un 40% desde los máximos de julio.
El período de envío tradicional para la temporada minorista navideña va de agosto a septiembre, pero los envíos comenzaron ya en abril de este año. Eso indicaría que los envíos de contenedores disminuirán de septiembre a noviembre, según una investigación de Huatai Futures.
Los inventarios de Estados Unidos se encuentran ahora en niveles saludables luego de un aumento en los envíos de mayo a julio, según un informe de mercado del transportista digital Flexport el lunes pasado. Una vez que se haya completado en gran medida el reabastecimiento de inventario, se espera que la demanda de transporte se debilite en las próximas semanas, según el informe.
Los datos de las Estadísticas de Comercio de Contenedores del Reino Unido revelaron que los envíos desde el este de Asia a Europa ya habían caído en julio, pasando de 1,75 millones de unidades equivalentes a veinte pies (TEU) en junio a 1,58 millones de TEU.
El sector exportador de China experimentó una notable desaceleración en julio, con una caída mensual de las exportaciones del 2,3% ese mes, a pesar de un aumento del 2,7% en agosto, según datos de la Administración General de Aduanas.
Esta desaceleración se refleja en la fuerte caída de los fletes. El índice de transporte de contenedores de exportación de Shanghai cayó un 10,6% para la ruta europea el lunes pasado respecto a la semana anterior, casi un 30% menos que su máximo de julio. El índice de rutas de la costa oeste de EE.UU. cayó un 6,9% durante la semana, un 40% menos que su máximo de julio.
Los transportistas informan que las tarifas de envío de contenedores en las principales rutas de este a oeste han estado cayendo en casi 1.000 dólares por contenedor de 40 pies (12 metros) cada semana, a medida que las líneas navieras compiten agresivamente para llenar los barcos. Las tasas de carga siguen siendo altas, entre el 90% y el 95%, pero la demanda insuficiente está obligando a las empresas a reducir los precios.
La volatilidad en las tarifas de envío se puede atribuir a una combinación de factores. La crisis del Mar Rojo, las incertidumbres arancelarias y la reposición de inventarios en el extranjero habían provocado un aumento en los envíos desde mediados de abril hasta julio, lo que provocó que los fletes aumentaran dramáticamente.
Sin embargo, la entrega de nuevos buques está empezando a aliviar las limitaciones de suministro provocadas por los desvíos del Mar Rojo. Huatai Futures proyecta que los astilleros globales entregarán 200.000 TEU adicionales de portacontenedores para fin de año, lo que ayudará a llenar el vacío de capacidad.
Más allá de las fuerzas del mercado, los conflictos laborales se vislumbran como posibles perturbadores. Las negociaciones entre la Asociación Internacional de Estibadores, que representa a 45.000 trabajadores en los puertos de contenedores de EE.UU., y el grupo empresarial United States Maritime Alliance se han estancado, lo que plantea la posibilidad de huelgas una vez que expire el contrato actual el 30 de septiembre. Una huelga podría provocar congestión portuaria y retrasos en los envíos, lo que restringiría aún más la capacidad de envío en las rutas de Asia a América del Norte y Europa.
Los fletes se desploman a medida que se desacelera el crecimiento de las exportaciones de China
