Estimados colegas entusiastas y apasionados del Comercio Internacional:
Ocupamos estar a la altura de las circunstancias. Nuestro gobierno y actual administración pública está en la mejor disposición de darnos lo que pidamos, siempre y cuando nuestra petición esté basada en valores sociales. Nuestro enfoque debe sustentarse en reconocer valor donde esté y darle lugar para conseguir con ello abatir el rezago que tanto lastima y confunde a la sociedad mexicana y que, por otro lado, también desalienta la innovación, el desarrollo y la inversión. Algunas veces además se vuelve factor de abatimiento, y en ocasiones, es componente de descontento, molestia, pobreza y rezago, o sea, se convierte en un círculo, donde cada vuelta decanta pobreza, crea mal resultado de descontento social y en algunos casos esa energía se convierte en acciones negativas.
Es fácil de evitar, hay unos pocos que deben hacer política y los demás trabajar en sus líneas de acción y afinidad a esta. Se ocupa articular las acciones para dar resultado. Justo eso está haciendo esta administración, escuchando a las cámaras y a las asociaciones para ver si traen líneas afines y hoja de ruta para comparar metas, objetivos y tiempos de ejecución. Están ocupados y con dudas porque desean hacer las cosas a la primera y bien, tarea difícil si no estamos los operadores para entenderlo. No esperarán por nosotros y como los maestros, trabajarán con los dispuestos y no con los mejores.
Ocupamos rápido tomar acción, ponernos manos a la obra porque cuanto más hacemos, más podemos hacer siempre. Necesitamos tener la hoja de ruta y el equipo de practicantes (jóvenes trabajando para el futuro) del lado nuestro e ir con la tendencia de enseñar y dejar huella al paso. No nos queda mucho tiempo a nosotros y al país con 50.6% de pobreza tampoco, según las estimaciones oficiales. No podemos quedarnos de brazos cruzados, es momento de actuar ahora por el presente y futuro de México. Recuerden que como dijera el escritor británico J. R. R. Tolkien: “El trabajo que nunca se empieza es el que tarda más en realizarse”.
Con ello quiero extender mi deseo de invitar a todos los presidentes de cámaras y organismos no gubernamentales para que planteen una hoja de ruta a sus agremiados con el fin de ponernos en acción de manera urgente. Del mismo modo pretendo hacer un llamamiento a la movilización de todos los recursos humanos y económicos a nuestro alcance para contribuir al crecimiento y desarrollo de nuestro país que tanto lo necesita y nosotros tenemos la obligación y el deber de trabajar en ese objetivo.
Saludos cordiales, Dr. Rogelio González Achirica