Vivir en estado de alarma y en cuarentena por varias semanas no es un reto fácil de afrontar para ninguno de nosotros. En medio de la crisis sanitaria mundial que ha provocado el coronavirus, hemos visto cómo han cambiado nuestros hábitos de consumo y comportamiento social. La colaboración ciudadana es clave para evitar las consecuencias de la propagación descontrolada de esta pandemia global. En ello ha tenido gran repercusión las redes sociales, donde se han propagado numerosas campañas de concienciación y de acciones que desarrollan distintos países alrededor del mundo para ayudar a los colectivos más afectados por el Covid-19.
Corea del Sur ha lanzado recientemente una campaña llamada #StayStrongCampaign (“Manténgase fuerte”) para convocar a la acción colectiva de los usuarios de las redes sociales y unirse en un esfuerzo coordinado que fomenta la resiliencia entre los miembros de la comunidad global. El país asiático ha sabido combinar las nuevas tecnologías con una correcta gestión de la información para lograr la complicidad de sus ciudadanos y pasar de ser uno de los países con más contagios de coronavirus a frenar de golpe las infecciones.
La campaña consiste en tres acciones:
- Cada usuario puede volver a crear el logo de StayStrong utilizando el generador en línea para escribir un eslogan personalizado
- Subir el logotipo creado a tus redes sociales
- Etiquetar a tres amigos y nominarlos para continuar el movimiento
La campaña ya ha ganado terreno con destacados miembros del Congreso, funcionarios gubernamentales y organizaciones que ofrecen palabras de aliento. El coronavirus es ajeno a los países y las fronteras. El mundo entero se enfrenta a una situación en la que la solidaridad y la unidad son nuestras armas más efectivas.
En este contexto, la gran mayoría de anunciantes han suspendido las campañas que tenían activas hasta la declaración del estado de alarma y las han sustituido por unos mensajes más adecuados a la coyuntura que atraviesa el mundo. La comunicación de marca, el compromiso social, el agradecimiento al personal sanitario y las fuerzas de seguridad, así como el optimismo y la esperanza, han inundado los mensajes de las compañías durante la etapa del confinamiento.
Así, no solo los gobiernos sino también las marcas, han entendido la importancia de aportar valor y la necesidad de su compromiso social para ayudar desde su posición a gestionar la crisis y mitigar el impacto del COVID-19. Han comprendido lo importante que es parar hoy, para seguir mañana, y que su forma de actuar y comunicar ante esta circunstancia definirá su relación con los consumidores en el futuro.