El Dubai Multi Commodities Centre (DMCC), la zona franca más grande de Dubai por número de compañías (17 mil), ha lanzado un paquete de soporte para respaldar a su comunidad empresarial mientras navega por el entorno económico actual que se vive a nivel mundial ante la crisis sanitaria provocada por el brote de coronavirus.
El paquete, aplicable a partir del 1 de abril y hasta el 30 de junio de 2020, incluye una gama de descuentos y exenciones y complementa las diversas iniciativas económicas anunciadas por el gobierno de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) para apoyar a los sectores empresarial y financiero.
Algunas de las medidas aplicables a las compañías miembros existentes de DMCC incluyen una exención del 100% sobre las multas por renovación tardía de la licencia, todas las multas de flexi desk y DMCC Business Center hasta el final de 2020, y la tarifa de permiso para compartir oficinas, así como las tarifas de restitución de la compañía.
La zona libre también ofrece exenciones de alquiler por dos meses para establecimientos comerciales afectados por la última directiva de Economía de Dubai que requieren un cierre temporal, donde DMCC es el propietario del edificio o el propietario.
El Gobierno de los EAU ha anunciado estas iniciativas para apoyar a las empresas, con un enfoque particular en las PYME y las nuevas empresas, y fortalecer la capacidad de recuperación financiera. Los incentivos para el nuevo registro y las compañías que ya están en proceso de registrarse con DMCC incluyen una reducción del 80% en la tarifa total de establecimiento de la compañía si los accionistas son residentes de Jumeirah Lakes Towers y opciones de pago flexibles para los nuevos inquilinos del Centro de Negocios DMCC.
DMCC, la Zona Franca emblemática del mundo
Con sede en Dubai, DMCC es la zona franca más interconectada del mundo y el principal eje de comercio y empresa para materias primas. Se estableció en 2002, para crear un mercado global para los productos básicos e impulsar los flujos comerciales a través de Dubai. Es la zona franca líder en los Emiratos Árabes Unidos, habiendo crecido de 28 compañías miembro en 2003 a 17,000 empresas miembros de 170 países, que emplean a más de 60,000 personas.
Entre los beneficios que ofrece esta Zona Franca se encuentra el 0% de impuesto sobre la renta corporativo y personal. Como expatriado, puede ser el propietario del 100% de la empresa que establece y enviar la totalidad de sus ganancias al lugar de origen, sin restricciones. Formará parte de una red de más de 20 sectores comerciales en un mercado interconectado con oportunidades ilimitadas.
La combinación de empresas, especialidad de las industrias, alta tecnología y complementariedad son las fortalezas que le han dado el éxito a las zonas francas de Dubái. El DMCC ha sido galardonado en varias ocasiones con el premio Zona Franca Global del Año por la fDi Magazine del Financial Times.
Medidas de apoyo del G20
Los líderes del G20 anunciaron una inyección de 5 billones de dólares en la economía global como parte de una política fiscal específica, medidas económicas y esquemas de garantías para contrarrestar el impacto social, económico y financiero de esta pandemia que no entiende de fronteras.
En el ámbito sanitario, el G20 ha prometido crear un frente común en la batalla contra la pandemia, su “absoluta prioridad”. “Compartiremos información oportuna y transparente; intercambiaremos datos epidemiológicos y clínicos; compartiremos materiales necesarios para la investigación; y fortaleceremos los sistemas de salud a nivel mundial”, esboza el comunicado tras la cumbre extraordinaria celebrada por videoconferencia.
El G20 apuesta por impulsar la cooperación científica internacional y la búsqueda de vacunas y encomienda a la Organización Mundial de la Salud la tarea de “evaluar las brechas en la preparación para pandemias”. En mitad de la escasez global de material sanitario, las grandes economías del mundo han acordado “expandir su capacidad de fabricación” para cumplir con las necesidades de suministro y “garantizar su amplia disponibilidad, a un precio asequible y de un modo equitativo, donde más se necesite y con la mayor rapidez posible”.
Sin embargo, la declaración final de esta cumbre extraordinaria es una expresión de buenas intenciones que carece de medidas concretas para trazar una “respuesta global” que salvaguarde el empleo, garantice la estabilidad financiera, minimice las interrupciones del comercio y el suministro y proporcione auxilio a los países más necesitados.
Para disminuir los efectos del virus en la economía, los líderes del grupo aceptan “hacer lo que sea necesario y usar todas las políticas a su alcance para minimizar el daño económico y social de la pandemia, restaurar el crecimiento global, mantener la estabilidad del mercado y fortalecer la resiliencia” pero sin detallar recetas concretas.
La declaración final, que no incluye mención alguna a la guerra del petróleo que protagonizan Arabia Saudí y Rusia, promete “trabajar para garantizar el flujo de suministros médicos vitales, productos agrícolas y otros bienes y servicios esenciales transfronterizos y resolver las interrupciones en las cadenas de suministro mundiales” así como “facilitar el comercio internacional” y asegurar un entorno comercial “no discriminatorio y estable” sin alusión expresa a las tensiones comerciales que amenazan con agravar la crisis. La nota matiza que las medidas de emergencia deben ser “concretas, proporcionadas, transparentes y temporales”.
Tras el anuncio de las medidas de apoyo del G20 al cierre de la jornada del 26 de marzo la moneda mexicana recuperó 82 centavos, o 3.46%, y cotizó en 23.10 por dólar, durante la sesión tocó las 22.98 unidades. Por su parte el mercado accionario mexicano registró un avance de 0.48%, en línea con el impulso alcista de Wall Street.
El G-20 lo forman Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Alemania, Reino Unido, Argentina, Australia, Brasil, Canadá -cuyo primer ministro, Justin Trudeau se conectó desde casa porque está en cuarentena tras dar positivo-, la India, Indonesia, Italia, Japón, México, Corea del Sur, Sudáfrica y Turquía, así como por la Unión Europa (UE); Arabia Saudí ocupa la presidencia este año y España es un país invitado permanente. Singapur, Suiza y Jordania también se unieron a la videoconferencia como invitados y damnificados por la propagación del virus.
Detrás de la declaración acordada en el texto final existe un pulso entre países como Alemania, que prefiere esperar a ver el impacto final de la pandemia, y otros como Italia, favorables a adoptar medidas de urgencia como la emisión de deuda conjunta.
Vladimir Putin puso sobre la mesa la posibilidad de crear un fondo especial bajo control del Fondo Monetario Internacional (FMI) dedicado en exclusiva a combatir el coronavirus. El presidente ruso propuso una moratoria a las sanciones sobre bienes de primera necesidad durante la pandemia al subrayar la importancia de crear “corredores verdes” en tiempos de crisis, “libres de guerras comerciales y sanciones, para el envío mutuo de medicamentos, víveres, equipos y tecnologías”.
Su homólogo chino, Xi Jinping, planteó medidas concretas como “rebajar aranceles, retirar obstáculos y facilitar el flujo de un comercio sin restricciones”. Boris Johnson hizo un llamamiento a todos los gobiernos del mundo a arrimar el hombro para derrotar al virus y adelantó una contribución de 230 millones de euros para la investigación dedicada a la búsqueda de una vacuna.
El presidente del Banco Mundial (BM), David Malpass adelantó que ultiman un paquete de ayudas de 160.000 millones de dólares para los próximos 15 meses. Esta decisión del BM está en la línea marcada por el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, quien solicitó a los líderes mundiales “un plan para tiempos de guerra”.
